Seminario sobre Derecho de Aguas abordó principales desafíos tras reforma al código de aguas en Chile

Reforma al código de aguas, derecho de aprovechamiento de aguas, protección de humedales, bosque nativo y escasez hídrica, fueron algunas de las temáticas que se abordaron durante el seminario práctico y de actualización en Derecho de Aguas que organizó la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la Universidad de Talca, en conjunto con la Facultad de Derecho de la Universidad Católica de Chile y en el que participaron, abogados/as, instituciones, organizaciones y juntas de vigilancia.

Según el decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UTalca, Iván Obando Camino, este seminario tuvo por objetivo “explicar a la comunidad lo que son las nuevas reformas, las nuevas instituciones que han surgido en el código de aguas luego de la gran reforma que se hizo el año 2022 en que cambiaron decenas de artículos del código”.

Por su parte, director del Programa de Derecho Administrativo y Económico de la Universidad Católica de Chile, Alejandro Vergara Blanco, insistió en que esta es “una jornada enfocada en los problemas prácticos actuales de la legislación vigente, acá no se está discutiendo cómo se podría reformar nuevamente el código de agua, sino que se está intentando discutir cómo resolver, con las reglas actuales, los problemas y los conflictos que están enfrentando las organizaciones de usuarios y cada uno de los titulares de derechos de aprovechamiento de aguas”.

El Presidente de la Junta de Vigilancia del Maule en tanto, José Manuel Silva, expresó que “esta reforma favorece, y estuvo 11 años en el Congreso, nosotros participamos activamente en lo que queríamos defender, fue un buen trabajo, dio a cada uno lo suyo y se logró aprobar con unanimidad. Lo que hay que hacer ahora es una buena interpretación y en ello es muy bueno el accionar académico”.

El Presidente de la Junta de la Federación de las Juntas de Vigilancia, Patricio Crespo, comentó que uno de los principales problemas que ellos enfrentan en la actualidad es que “la Dirección General de Aguas (DGA) no tiene capacidad para recibir todas las inscripciones, tenemos una oficina especial en Santa Cruz donde llevamos 2 mil inscripciones, pero no hay capacidades tecnológicas, ni humanas”. Agregó que con estas instancias “se logra unir los distintos mundos para que se conozcan y vean cuáles son nuestras necesidades”.